Esta pregunta probablemente nos la hemos planteado varias veces, y es que la mayoría no tenemos recuerdos de nuestros primeros años de vida, aunque tal vez nos gustaría tenerlos. ¿A partir de que edad recuerdas o tienes uso de razón? Bueno, mientras lees este artículo piensa en cuál es el recuerdo más lejando que tengas de tu infancia.
Según el sitio bbc.co.uk, los científicos llaman a esta ausencia de recuerdos como amnesia infantil. Una nueva investigación realizada en Canadá revela que antes de ir a la escuela (alrededor de los cuatro años) los niños pueden recordar lo que les ocurrió en sus años previos -incluso experiencias anteriores a los 18 meses- pero dos años más tarde esas memorias ya se habrán borrado.
¿Por qué no logramos recordar?
Es un hecho que no podemos recordar gran parte de lo que nos ocurrió antes de los tres o cuatro años de edad. La razón todavía es incierta.
Algunos expertos especulaban que esto se debe a que antes de los cuatro años no tenemos la capacidad cognitiva y de lenguaje para formar memorias. Y que aunque estos recuerdos no se pierden del todo, no pueden almacenarse en nuestro cerebro. La nueva investigación parece darnos una explicación.
Participaron 140 niños de entre 4 y 13 años que relataron tres de sus experiencias más tempranas que pudieran recordar y el período en que éstas habían ocurrido. Descubrieron que entre más pequeños los niños, más recuerdos tenían de sus primeros años, incluso a los 18 meses de edad.
Dos años más tarde se les pidió a los niños que recordaran tres experiencias tempranas de su vida. ¿El resultado? Los niños que tenían entre 4 y 7 años recordaban experiencias muy distintas de las que habían hablado antes. Muchos de los recuerdos que habían tenido dos años antes habían desaparecido. Mientras que los niños que tenían entre 10 y 13 años describieron las mismas experiencias tempranas en ambos experimentos.
¿Que pasa con los recuerdos de la infancia?
A diferencia de lo que se creía, los niños pequeños sí tienen capacidades cognitivas, linguísticas y de memoria para recordar las cosas que les ocurrieron en el pasado. Pero los recuerdos más tempranos de los niños pequeños parecen cambiar y son reemplazados por recuerdos ocurridos a edades más tardías